- Adam (hombre) término que significa humanidad o humano (Génesis 1: 26-27).
- Ish (hombre), implicando "fortaleza y vigor" de mente y cuerpo (1 Samuel 4: 2; 26: 15). También significa "marido", en contraste con "mujer" (génesis 2: 23; 3: 6).
- Enosh (hombre). Significa "sujeto a la corrupción mortal"; no se usa este término del hombre hasta después de la caída (Génesis 6: 4; 12: 20; salmo 103: 15).
- Ben (hijo). Con palabras adjuntas, como "hijo de valor (hombre) o varón valiente (2 reyes 2: 16).
- Baal (hombre), en el sentido de amo o señor (Génesis 20: 3).
- Geber (hombre) en el sentido de poderoso (éxodo 10: 11; 12: 3).
En el griego del nuevo testamento se usan
los siguientes términos principales:
- Anthropos (hombre), en el sentido de "humanidad" sin tener en cuenta el sexo. Ejemplo: "no sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios" (Mateo 4: 4).
- Aner (hombre), en distinción de una mujer "el varón es la cabeza de la mujer" (1 Corintios 11: 3). Por tal razón es el término comúnmente usado para "marido" "José, marido de María" (Mateo 1: 16-19).
El hombre fue la cumbre de la obra
creadora de Dios y recibió el dominio sobre la esfera en la que fue situado. La
imagen de Dios en el hombre tiene que ver con las tres características
personales: inteligencia, sensibilidad y voluntad.
En estos días, cuando las filosofías
falsas representan en forma errónea la naturaleza del hombre, es importante que
estemos fundamentados en la representación correcta. De la misma manera,
también estaremos capacitados para entender las doctrinas del pecado, el
juicio, la salvación, que se basan en el punto de vista bíblico, relativo a la
naturaleza del hombre.
1. EL ORIGEN DEL HOMBRE
El hombre fue la cumbre de la obra
creadora de Dios y le dio el dominio sobre la esfera en la que fue situado. Es
imposible que el hombre surgiera por evolución de cualquiera de las formas
inferiores de vida, pues la Biblia enseña con claridad la doctrina de la
creación especial, lo cual significa que Dios hizo a cada criatura "según
su especie" "creó Dios al hombre a su imagen" (Génesis 1: 27).
¿Cómo
creó Dios al hombre?
1 -Del polvo de la tierra. Hizo una imagen
en forma humana y sopló en su nariz aliento de vida; “y fue el hombre un ser
viviente” (Génesis 2: 7).
2 –La mujer fue formada de una de las
costillas del hombre. “De la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una
mujer, y la trajo al hombre" (Génesis 2: 22).
Siendo el hombre la creación perfecta de
Dios fue dotado de grandes capacidades físicas e intelectuales. Tanto así, que
tiene la capacidad de gobernar sobre el resto de la creación, y aún más, de
elegir su propio futuro y amistarse con Dios, para vivir eternamente
disfrutando el reino futuro de Cristo.
3–Capacidades del hombre:
a) Capacidades físicas. De acuerdo con las
investigaciones científicas, el cuerpo está compuesto de ciertos elementos materiales,
tales como Oxígeno (O), Carbono (C), Hidrógeno (H), Nitrógeno (N), Calcio (Ca),
Fósforo (P), Potasio (K), Azufre (S), Sodio (Na), entre otros que también
podríamos mencionar; sólo que éstos, existen en porcentajes menores. La unión
de todos los elementos anteriores hace posible la consistencia de un cuerpo
físico eficiente.
b) Capacidad intelectual. Ésta reside en
el cerebro. De acuerdo con los estudios científicos, una parte importante de
la corteza cerebral, el área frontal, interviene en el conocimiento, la
inteligencia y la memoria. Por ejemplo, después de un estímulo sensorial como
la visualización de un nuevo objeto, este es archivado y almacenado por la
memoria durante un corto periodo, o a veces de forma más permanente en
determinadas células nerviosas del cerebro. Cuando el objeto se ve de nuevo, la
memoria se activa y el objeto es reconocido. El que un anciano pueda recordar
hechos de la infancia es un ejemplo de la extraordinaria capacidad de
almacenamiento del cerebro. Los neurólogos estudian hoy el mecanismo celular
por el cual las células nerviosas almacenan la memoria.
c) Capacidades espirituales. El espíritu
es la sustancia inmaterial que diferencia al hombre del animal. Es el aliento
de Dios que introdujo al hombre cuando sopló en su nariz.
2. EL HOMBRE SEGÚN LA EVOLUCIÓN
La evolución enseña que todos los seres
vivos han pasado por un proceso de formación y transformación, negando así el
hecho mismo que enseña la Biblia, que hay especies según su género. El autor de
esta teoría fue Carlos Darwin, en el año 1882. Triste es notar que aunque a su
muerte se retractó de su teoría, la hipótesis escrita en sus libros, fue tomada
por científicos y profesores, siendo así una materia en muchos colegios y
universidades hoy en día. ¿Cómo es enseñada?
1 -Que de una pequeña célula se formó
todo, pasando por un gran proceso. Ejemplo: del animal hasta llegar a ser hombre.
¿Qué dice génesis 1: 11, 24? Esto se refuta de la siguiente manera:
A -La ausencia de piel protectora en el
hombre como es en los animales. Usted puede darse cuenta que entre los ser
vivos y creados, el hombre es el único que no nació con vestido permanente.
B -El tamaño del cerebro del mono con el
del hombre, no tiene similitud.
C -El uso de instrumentos y hacer fuego,
cosa que ningún animal lo ha hecho jamás.
2 -Las naciones que han adoptado esta
teoría han tenido grandes problemas morales, ya que han creído no ser
responsable de sus hechos (Gálatas 6: 7).
3 -Los científicos en biología no la
prueban, ya que cada criatura es de propia especie (Génesis l: l, 21, 27).
4 -Pruebas directas. Génesis 1:1 Dice:”En
el principio creó Dios los cielos y la tierra” (Hebreos. 11:2) nos dice:
“Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos”. Esto nos habla de
los fundamentos de la fe.
5 -Pruebas indirectas (Salmos 33: 6, 9; Juan
17:5; Efesios l: 4; Salmos 90: 2; Juan 1:1; Colosenses l: 17; Hebreos 9: 16,
concluyendo así, que el hombre fue un resultado de un acto de creación
divina. Hechos que nos comprueban esto:
- La historia en todas sus dimensiones,
- Las diferentes lenguas del mundo (Génesis 11: 7).
- La psicología (Estudio del alma del hombre).
- La fisiología (Ciencia que estudia el funcionamiento de los seres vivos, en lo que respecta a sus funciones vitales, ocupándose de las actividades de órganos y tejidos).
¿Qué aprendemos de todo esto?
A –Que nada hay como lo enseñan los
evolucionistas, todo es teoría o filosofías humanistas.
B -Que existe un patrón en todo género, y
esto jamás cambiará.
C -Que el medio de metamorfosis, que
tienen ciertas formas de vida, no es el proceso de evolución, sino un sistema
de desarrollo natural de ciertas especies.
3. NATURALEZA DEL HOMBRE
De acuerdo con lo que se nos dice en
Génesis 2: 7, el hombre está compuesto de dos substancias: una material
denominada cuerpo, y una inmaterial, o su alma. El alma proporciona vida al
cuerpo, y cuando el alma es quitada, el cuerpo muere. Más de acuerdo a lo que
se nos dice en 1 Tesalonicenses 5:23 y Hebreos 4: 12, el hombre está compuesto
de tres substancias: espíritu, alma y cuerpo. Algunos exégetas bíblicos han
definido ésta tricotomía, frente a la dicotomía, es decir la doctrina de
aquellos que sostienen que solamente dos partes constituyen al hombre. Ambos
puntos de vista son correctos cuando se entienden como corresponde. Veámoslo de
esta manera:
DICOTOMÍA
Génesis 2: 7.
Como
puede verse, la dicotomía presenta la naturaleza del hombre con sus dos
substancias generales y diferentes: La inmaterial y la física.
TRICOTOMÍA
1 Tesalonicenses 5: 23; Hebreos 4: 12.
La tricotomía no contradice a la
dicotomía, sino, la explica de manera más completa. Aunque se hallan separados
el espíritu y el alma no son separables. Se saturan y compenetra mutuamente. En
virtud del hecho que están íntimamente relacionados, los vocablos
"espíritu" y "alma" se emplean con frecuencia en forma
intercambiable (Eclesiastés 12: 7; Apocalipsis 6: 9); de manera que en un lugar
la sustancia espiritual del hombre se describe como alma (Mateo 10: 28), y en
otro lugar como espíritu (Santiago 2: 26).
Cuando una persona es arrebatada
transitoriamente fuera del cuerpo (2 Corintios 12: 2), se dice que están
"en el espíritu" (Apocalipsis 4: 2; 17: 3. El doctor Scofiel dice lo
siguiente: "porque el hombre es espíritu,
es capaz de tener conciencia de Dios, y de tener comunión con él; porque es alma, tiene conciencia de sí mismo;
porque es cuerpo, tiene mediante los
sentidos, conciencia del mundo que le rodea".
4. EL ALMA HUMANA
En todo ser humano habita un espíritu dado
por Dios, en forma individual (Números 16: 22; 27: 16). Éste espíritu fue formado
por el creador en la parte interior de la naturaleza del hombre, y es capaz de
renovación y desarrollo (Salmo 51: 10). El espíritu es centro y fuente de la vida del hombre; el alma es dueña de esta vida y la usa, y por medio
del cuerpo la expresa. En el principio Dios alentó el espíritu de vida en el
cuerpo inanimado y el hombre se convirtió en alma viviente. De manera entonces
que el alma es un espíritu que habita en un cuerpo, o un espíritu humano que opera
por medio del cuerpo, y la combinación de ambos constituyen al hombre en
"alma". El alma sobrevive a la muerte, porque es vitalizada por el
espíritu, y sin embargo ambos, el alma y el espíritu son inseparables porque el
espíritu está entretejido en la trama misma del alma. Están fundidos o
amalgamados, es decir, en una sola sustancia.
El espíritu es lo que distingue al hombre
de todas las cosas creadas. En contraste con la vida animal, los animales
tienen un alma (Génesis 1: 20, "en el original hebreo") pero no
espíritu. Por lo tanto, los animales no pueden conocer las cosas de Dios (1
Corintios 2: 11; 14: 2; Efesios 1: 17; 4: 23)
El espíritu del hombre, cuando es habitado
por el espíritu de Dios, se convierte en centro de adoración, de oración, de
alabanza, y de servicio (Romanos 8: 16; Juan 4: 23,24; 1 Corintios 14: 15; Romanos
1: 9; Filipenses 1: 27).
El espíritu, puesto que representa la
naturaleza más elevada del hombre, está relacionado con la cualidad de su
carácter. Aquello que requiere dominio de su espíritu se convierte un atributo
de su carácter. Por ejemplo si permite que el orgullo lo domine, se dice que
tiene un espíritu altivo (Proverbios 16: 18). De acuerdo con las influencias
respectivas que lo controlan, un hombre puede tener:
- Un espíritu perverso (Isaías 19: 14)
- Un espíritu provocador e irritable (Salmo 106: 33)
- Un espíritu precipitado (Proverbios 14: 29)
- Un espíritu agitado (Génesis 41: 8)
- Un espíritu contrito y humillado (Isaías 57: 15; Mateo 5: 3)
Cuando las malas pasiones dominan el
hombre, y éste manifiesta un espíritu perverso, ello significa que la vida
natural, o del alma ha destronado al espíritu; éste ha luchado y perdido la
batalla. El hombre es presa de sus sentimientos y apetitos naturales, y es
"carnal". El espíritu no ejerce ya dominio de la situación, y su
carencia de poder se describe como un estado de muerte. De allí la necesidad de
un nuevo espíritu (Salmo 51: 10; Ezequiel 18: 31). Sólo aquel que sopló en el
cuerpo del hombre el hálito de vida, puede impartir al alma del hombre una
nueva vida espiritual (Juan 3: 8; 20: 22; Colosenses 3: 10).
5. EL ALMA HUMANA (CONT.)
El alma es el principio vivificante e
inteligente que anima al cuerpo humano, empleando los sentidos corporales como
sus agentes en la exploración de las cosas materiales, y los órganos corporales
para expresión de sí misma y comunicación con el mundo exterior. Debe su
existencia al hálito sobrenatural del espíritu de Dios. La debemos describir
como espiritual y viviente, puesto que procede de Dios; la describimos como
natural, porque opera por medio del cuerpo. Y sin embargo no debemos pensar que
el alma es partes de Dios, porque peca. Es más correcto afirmar que es el don y
obra de Dios (Zacarías 12:1).
Tomaremos en cuenta las siguientes
distinciones:
1 -El alma distingue la vida del hombre,
de la bestia y de la vida inconsciente de las plantas, en contraste con las
cosas inanimadas.
Tanto el hombre como la bestia tienen alma
(Génesis 1: 20 "significa ánima viviente”). Podemos decir que
las plantas tienen alma (refiriéndose al principio de vida) pero no es un alma
consciente.
2 -El alma distingue al hombre de los
animales. Los animales tienen alma, pero es un alma terrena que perece al morir
el cuerpo (Eclesiastés 3: 21). El alma del hombre es de una cualidad diferente,
puesto que está vivificada por el espíritu humano. "Toda carne no es la
misma carne", de manera que es así también con el alma. Hay un alma humana
y un alma animal. Es evidente que el hombre hace lo que los animales inferiores
no pueden hacer, no importa que inteligentes sean. Su inteligencia es la del
instinto y no de la razón. El instinto de los animales puede manifestar la
sabiduría del hacedor, pero sólo el hombre puede conocer y adorar a su creador.
A fin de ilustrar con más amplitud el
elevado sitial que ocupa el hombre en la escala de la vida, vamos a distinguir cuatro
grados distintos de ésta, que superan en nobleza unos a otros a medida que se
independiza de la materia:
a) La
vida interpretativa. Ésta necesita órganos materiales para asimilar los
alimentos
b) La
vida sensitiva. Que emplea los órganos para percibir y establecer contacto con
lo material.
c) La
vida intelectual. Que percibe el significado de las cosas mediante pensamientos
lógicos y no meramente por los sentidos.
d) La
vida moral. Que concierne a la ley y la conducta.
Los animales tienen vida vegetativa y sensitiva;
el hombre tiene vida vegetativa, sensitiva, intelectual y moral.
3 -El alma distingue a un hombre de otro y
forma de esa manera la base de la individualidad. El vocablo "alma"
es por lo tanto empleado con frecuencia en el sentido de "persona" (Éxodo
1: 5; Romanos 13: 1).
4 -El alma distingue al hombre no sólo de
las órdenes inferiores, sino también de las órdenes superiores de la vida. No
hallamos referencia alguna con respecto al alma en los ángeles, porque no
tienen cuerpo similar al de los seres humanos. El hombre se convirtió en "ánima
viviente", es decir, un alma que satura un cuerpo terrenal sujeto a
condiciones terrenales. Se describe a los ángeles como espíritus (hebreos 1:
14) porque no están sujetos a condiciones materiales o limitaciones. Por lo
mismo, Dios se denomina "espíritu"; con la diferencia que los ángeles
son espíritus creados y finitos, mientras que Dios, es un espíritu eterno e
infinito.